Aprender a Volar
El Paramotor es la forma más sencilla de aviación ligera que existe, una de las más seguras, y también la de menor costo. Consiste en volar gracias a la sustentación dada por un parapente (planeador de tela) y la propulsión otorgada por un pequeño motor con una hélice en la espalda del piloto, aparato que también recibe el nombre de paramotor. Todo el equipo no pesa más de 32-40 kg, y la mayoría cabe en el baúl de un automóvil.
El deporte surgió en Francia a finales de los 80, cuando algunos parapentistas comenzaron a adaptar propulsores a sus equipos de parapente para poder despegar desde zonas llanas alejadas de las montañas. Algunos de esos pioneros hoy son líderes de las principales fábricas de Paramotores europeas, y las máquinas han evolucionado desde las primeras (y pesadas) unidades que adaptaban motores de corta-césped a muchas que hoy usan motores especialmente diseñados para el vuelo. Los paramotores se han hecho más fiables y ligeros, los hay de 2 tiempos e incluso algunos de 4 tiempos, y ya se fabrican parapentes especiales para su uso con propulsión, más resistentes al peso, más seguros y con características más adecuadas a este tipo de vuelo. La mayoría de los pilotos de paramotor son hombres mayores de 30 años, pero no hay límites de sexo ni edad a partir de unos requisitos mínimos de estatura y peso. El desarrollo de los paratrikes o carritos de paramotor ha permitido abrir el deporte a un espectro aún más amplio de aficionados ya que elimina el problema de cargar con el equipo sobre la espalda en despegue y aterrizaje, por lo que prácticamente cualquiera con ganas puede volar. El paramotor en ambas mosalidades es un deporte practicado por hombres y mujeres en muchos países del mundo y cuenta ya con un circuito de competición de alto nivel. También comienza a desarrollarse una modalidad 'freestyle' en la que se privilegia el vuelo rasante y las maniobras acrobáticas.
A.D.M.A.
Asociación Deporte Motor Argentina